Las autoescuelas de Vigo han sido malas. El Tribunal Galego de Defensa da Competencia (TGDC) se ha estrenado en su facultad sancionadora con la imposición de multas por un importe total de casi 600.000 euros a la Asociación Provincial de Autoescolas de Pontevedra y a cincuenta autoescuelas del sur de la provincia que examinan a sus alumnos en Vigo.
Establece el TDGC que durante tres años se habían puesto de acuerdo para cobrar todas el mismo precio y socavar las reglas de la libre competencia. Las pequeñas empresas familiares del sur de Pontevedra tendrán ahora que afrontar ahora el pago de una multa millonaria y ser más competitivas en el futuro mediante el abaratamiento de precios, la mejora la calidad de sus servicios, etc, etc... y es que en la práctica estas PYMES mafiosas actuaban como si de un mercado oligopolista se tratara. El cártel de las autoescuelas al descubierto, podría ser el titular de algún periódico sensacionalista. Bravo. Los mecanismos de control han funcionado, las instituciones públicas velan por el interés general. Ciertamente, y a la luz de los hechos, parece indudable que ha existido mala fe por parte de estas “grandes” empresas en su avidez por obtener beneficios a toda costa, pero seguro que sus responsables están más que enfadados. No, no nos llevemos las manos a la cabeza porque, ¿Existe el mismo celo y diligencia cuando se trata de vigilar los precios de los cárteles de verdad que no es otro que el que controlan las grandes multinacionales? ¿Qué pasa con los precios sospechosamente parecidos de las cosméticas, las petroleras, las aerolíneas, las operadores de móviles, etc, etc? Sí, sí, de vez en cuando les ponen una multa, ¿Y qué? Recurso va, recurso viene, transcurren un par de años y para entonces ya han hecho caja suficiente como para pagar la sanción tres o cuatro veces. Las “grandes y poderosas” autoescuelas del cártel de Vigo no tendrán tanta suerte.
Foto y más información en:
www.farodevigo.es/secciones/noticia.jsp?pRef=3248_4_196151__Galicia-Competencia-multa-autoescuelas-area-Vigo-600000-euros-pactar-precios
Establece el TDGC que durante tres años se habían puesto de acuerdo para cobrar todas el mismo precio y socavar las reglas de la libre competencia. Las pequeñas empresas familiares del sur de Pontevedra tendrán ahora que afrontar ahora el pago de una multa millonaria y ser más competitivas en el futuro mediante el abaratamiento de precios, la mejora la calidad de sus servicios, etc, etc... y es que en la práctica estas PYMES mafiosas actuaban como si de un mercado oligopolista se tratara. El cártel de las autoescuelas al descubierto, podría ser el titular de algún periódico sensacionalista. Bravo. Los mecanismos de control han funcionado, las instituciones públicas velan por el interés general. Ciertamente, y a la luz de los hechos, parece indudable que ha existido mala fe por parte de estas “grandes” empresas en su avidez por obtener beneficios a toda costa, pero seguro que sus responsables están más que enfadados. No, no nos llevemos las manos a la cabeza porque, ¿Existe el mismo celo y diligencia cuando se trata de vigilar los precios de los cárteles de verdad que no es otro que el que controlan las grandes multinacionales? ¿Qué pasa con los precios sospechosamente parecidos de las cosméticas, las petroleras, las aerolíneas, las operadores de móviles, etc, etc? Sí, sí, de vez en cuando les ponen una multa, ¿Y qué? Recurso va, recurso viene, transcurren un par de años y para entonces ya han hecho caja suficiente como para pagar la sanción tres o cuatro veces. Las “grandes y poderosas” autoescuelas del cártel de Vigo no tendrán tanta suerte.
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www.farodevigo.es/secciones/noticia.jsp?pRef=3248_4_196151__Galicia-Competencia-multa-autoescuelas-area-Vigo-600000-euros-pactar-precios
1 comentario:
Es una verguenza. Si quieres examinarte de moto por libre en Vigo, has de esperar fuera de las instalaciones donde se celebra el exámen de circuito cerrado. El lugar pertenece a una asociación de autoescuelas, no a la DGT; así nos encontramos a los alumnos de autoescuesla practicando en un circuito anexo hasta el momento de examinarse. Por tanto para obtener una licencia oficial, no se examinan en las mismas condiciones todos los asistentes: unos practican momentos antes y otros no. Una verguenza.
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